Brote psicótico y tratamiento
Brote psicótico
El brote psicótico es un trastorno grave que implica un juicio de realidad alterado con presencia de delirios y/o alucinaciones junto con una alteración del comportamiento. En general, el primer brote suele aparecer entre los 16 y los 25 años, y puede repetirse en mayor o menor grado durante la vida.
Causas
Sus causas pueden ser tumorales, metabólicas, tóxicas o funcionales, como se denomina al grupo de las psicosis para las cuales no se ha demostrado un agente causal orgánico definitivo y que en su génesis hay elementos psicológicos, emocionales y sociales importantes. Sus causas pueden ser:
- Depresión.
- Trastorno bipolar.
- Epilepsia.
- Tumor cerebral.
- Demencia.
- Ictus.
- Consumo de alcohol y otras drogas.
Psicosis aguda
Es la urgencia psiquiátrica más frecuente, con una prevalencia entre 0,3 y 17 casos por cada 1.000 habitantes. Corresponde a la instalación rápida y drástica de los síntomas.
Signos y síntomas
- Alucinaciones, las auditivas son las más frecuentes.
- Reacciones de pánico.
- Violencia hacia sí mismos o hacia otros.
- Ilusiones; por ejemplo, puede creer que unos puntos que se encuentran en el suelo son insectos o que un cable eléctrico es una serpiente.
- Conversación ilógica.
- Ideas delirantes.
- Pensamientos de persecución.
- Alogia o pobreza del habla.
- Esquizofasia (Embrollo de pensamientos desconectados y desorganizados).
- Movimientos bruscos.
- Conductas catatónicas, (El paciente puede mantener una postura rígida y resistir los esfuerzos ante todo intento de moverle; también pueden observarse posturas infrecuentes o extrañas).
Enfermedades mentales
Las enfermedades mentales con síntomas psicóticos que se consultan en urgencias con mayor frecuencia son:
Esquizofrenia
La esquizofrenia es el brote o descompensación de una enfermedad previamente diagnosticada, generalmente debido a una falta de adherencia al tratamiento farmacológico.
Signos y síntomas
- Alteración del pensamiento.
- Lenguaje incoherente sin demasiado sentido.
- Delirios, generalmente de autorreferencia, de grandeza o somáticos.
- Alucinaciones, generalmente auditivas.
- Aspecto embotado, plano, con facies inexpresivas.
- Mirada esquiva.
- Escaso parpadeo.
- Deterioro del funcionamiento social, laboral o familiar.
- Se puede observar una merma en el autocuidado.
Consumo de tóxicos
El consumo de tóxicos principalmente cannabis, anfetaminas y cocaína, pueden producir una sintomatología similar a los síntomas positivos de una esquizofrenia. En estos casos, una exploración física general y neurológica puede orientar hacia una psicosis tóxica, aunque es fundamental realizar un examen de tóxicos en orina. Es importante conocer la evolución cronológica del consumo, así como la cantidad.
Signos y síntomas
- Beligerancia, (Dispuesto para la guerra).
- Labilidad emocional.
- Alteraciones del pensamiento y del juicio crítico.
- Deterioro de la actividad social o laboral.
- Alteraciones de la percepción, ciclo de sueño y vigilia.
- Cambios en la atención y concentración.
- Desorden de la actividad psicomotora y de las relaciones interpersonales.
Fase de manía
Se caracteriza por un estado de ánimo eufórico, expansivo y lenguaje verborreico. Estos pacientes suelen ir acompañados de algún familiar con quien se puede corroborar estos datos.
Signos y síntomas
- Ánimo eufórico y expansivo.
- Lenguaje verborreico, saltígrado, con ideo fugacidad.
- Conducta temeraria y megalomaníaca.
- Minimización de riesgos.
- Creencia de totipotencialidad con una fácil tendencia a la irritación si se le contradice.
- Presencia de delirios.
- Convicción de ganancias económicas superiores a las reales.
- Conocimiento de diversos idiomas.
Depresión unipolar o bipolar
En sus forma más grave puede tener una sintomatología intensa de delirios, alucinaciones o estados catatónicos. Es muy importante interrogar al paciente acerca de la presencia de ideas de autólisis, debido a su frecuencia y a la letalidad de los actos que pueda realizar.
Signos y síntomas
- Delirio.
- Alucinaciones.
- Estados catatónicos.
- Representa un peligro inminente para el paciente.
Trastorno esquizoafectivo
Se caracteriza por episodios, de días o semanas de duración, en los cuales hay una alteración del estado de ánimo, bien maníaco o bien depresivo, junto con síntomas psicóticos, preferiblemente de forma simultánea o, al menos, con pocos días de diferencia entre unos y otros.
Signos y síntomas
- Alteración del estado de ánimo.
- Manía.
- Depresión.
- Síntomas psicóticos.
Trastorno delirante crónico
Es menos frecuente clínicamente porque son pacientes que socialmente pueden funcionar con normalidad. Este trastorno se caracteriza por que su síntoma cardinal, si no el único, es un delirio bien sistematizado, al cual obedece el comportamiento y el estado de ánimo. En general, la personalidad no se ve afectada y suele ser paranoide.
Signos y síntomas
- Delirio bien sistematizado.
- Paranoide.
- Suspicaz.
- Hipersensible e hipervigilante.
- El paciente quiere estar aislado.
Tratamiento
La mayoría de los trastornos psicóticos se tratan con un método combinado de tratamiento farmacológico y psicoterapia.
Psicoterapia
Junto con la administración de fármacos, pueden aplicarse distintos tipos de psicoterapia, que comprenden la psicoterapia individual, la de grupo y la familiar. Es posible que sea necesario ingresar a algunos pacientes para estabilizar el trastorno que sufren, mientras que muchos de ellos pueden recibir tratamiento ambulatorio. Cada persona responde al tratamiento de forma diferente; algunas mejoran rápidamente y otras necesitan varias semanas o meses para obtener el alivio de los síntomas.
Cuando los síntomas son incapacitantes, puede requerirse un tratamiento indefinido. La mayoría de las personas con esquizofrenia tienen que tomar algún medicamento y recibir psicoterapia de apoyo durante el resto de su vida.
Farmacológico
Los antipsicóticos son el tipo de psicofármaco empleado con más frecuencia para su tratamiento. Estos medicamentos no curan los trastornos, pero se utilizan con un grado de eficacia variable para tratar los síntomas problemáticos.
El objetivo del tratamiento es lograr una compensación del estado mental agudo para instaurar, secuencialmente, un tratamiento de mantenimiento. Si el paciente ya tomaba neurolépticos, es preciso instaurar el tratamiento, evaluando el motivo del abandono, que en la mayoría de ocasiones se debe a la nula conciencia de enfermedad o bien a reacciones adversas de los fármacos.
Es preciso instaurar un tratamiento con antagonistas dopaminérgicos en aquellos pacientes que no han recibido tratamiento farmacológico previo y como manejo en urgencias de la crisis psicótica de estos pacientes. Los fármacos y dosis eficaces son:
- Haloperidol en dosis de 3 a 10 mg/día.
- Olanzapina en dosis de 10 a 3 mg/día.
- Risperidona en dosis de 3 a 9 mg/día.
- Quetiapina en dosis de 700 a 1.000 mg/día.
- Amisulprida en dosis de 800 mg/día.
En urgencias, debido a la seguridad y experiencia acumulada, se suelen utilizar como primera opción fármacos como haloperidol y olanzapina. Sin embargo, en caso de negación del paciente, falta de respuesta o reacciones adversas a ellos, se recomienda el uso de los antipsicóticos de última generación, como risperidona o quetiapina.
Para evitar los efectos extrapiramidales puede emplearse biperideno en dosis de 4 mg/día. Lógicamente, las dosis iniciales y de mantenimiento deberán ajustarse en función de la intensidad de la sintomatología y las características del paciente.
Para facilitar el control de la ansiedad y la angustia puede ser precisa la administración de otros fármacos, principalmente benzodiacepinas en dosis variables, sobre todo durante el inicio de los episodios agudos.
Sintomatología intensa
En presencia de sintomatología intensa y desorganizada, insomnio prolongado o catatonia, es recomendable administrar:
- Lorazepam (2-4 mg/día oral o 1-2 mg/día intravenoso [i.v.] o intramuscular [i.m.]).
Las alternativas son:
- Midazolam 5 mg (i.m). de 1 a 4 administraciones separadas por una hora.
- Diazepam en dosis de 5 mg (i.m).
- Clonazepam vía oral (v.o.).
Sintomatología depresiva
Puede ser útil añadir medicación específica como un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina.
Depresión bipolar con síntomas psicóticos
Se administra una asociación de un estabilizador del ánimo, como litio o valproato, junto con lamotrigina.
- Litio.
- Valproato.
- Lamotrigina.
Mania
En casos de manía es recomendable iniciar tratamiento con litio o valproico junto con un antipsicótico de nueva generación como puede ser aripiprazol en dosis bajas como 5-15 mg/día.
- Litio.
- Valproico.
- Aripiprazol.
Brote psicótico y tratamiento
Información del Autor
- Plazas Lorena. Enfermera. Trabajo propio.
Referencias bibliográficas
- García-Carmona, J.A; Pavez Reyes, F.A, 2018, “Urgencias y emergencias psiquiátricas”, Psicosis aguda, Modulo 17.7, pp: 1-7, Editorial Medica Panamericana, España. Disponible en: file:///C:/Users/loren/Downloads/Enfermeria/Psicosisaguda.pdf
- Womble Donna, 2011, Introducción a la enfermería en salud mental, 2*edición, pp: 1-646, Philadelphia, USA. Disponible en: Introduccion-a-la-enfermeria-de-la-salud-mental.pdf
Última actualización: [ 04/03/2024 ]